Pérdidas que dejan huellas

Y amores que se vuelven eternos Siguiendo la historia que he ido compartiendo contigo, hay algo que marcó mi alma para siempre: la pérdida de un ser amado. Mi Yaya. Mi bisabuela. Una mujer increíble que me enseñó lo que era el amor firme, el cariño sencillo y la fortaleza que se transmite con la mirada. Ella fue la figura más poderosa que conocí, incluso por encima de muchos adultos a mi alrededor. Aunque decía que no creía en Dios, estoy segura de que llegó al paraíso. Sé que, desde donde está, me cuida y, como siempre, desea que sea feliz. Vivir su muerte ha sido una de las experiencias más difíciles de mi vida. Para mí, ella era eterna. No imaginaba un mundo sin su presencia física, sin sus cuidados, sin sus palabras. Me hace tanta falta… su fortaleza, su forma de amar, de decidir, de protegerme. Ella me decía que yo era su cielo. Pero la verdad es que ella era el mío. Desde que partió, no he podido perdonarme. Me dicen que no es mi culpa. Pero… ¿cómo saberlo con certeza? ¿Cómo soltar esta sensación que a veces me oprime el pecho? Tal vez no tenga sentido para muchas personas, pero yo lo siento así. Siento que su partida fue una lección que no supe leer a tiempo, y en lugar de verla como un aprendizaje, la he cargado como culpa. Y entonces, otra vez, aparecen los juicios. Esas críticas que desde pequeñas nos hacen creer que todo lo malo que ocurre a nuestro alrededor es nuestra responsabilidad. Que si alguien se va, es porque algo hicimos mal. Que si enfermamos, es porque no fuimos lo bastante fuertes. Qué dura puede ser esa voz interna… Y cuánto cuesta callarla. Hoy, mientras te escribo esto, querida lectora, me pregunto: ¿Tú también has perdido a alguien que marcó tu vida? ¿También has sentido esa mezcla de amor y culpa, de nostalgia y silencio? Este blog, El Tiempo del Cuerpo, nació para acompañarnos, para recordar que no estamos solas, que nuestras historias tienen eco, que la pérdida también puede sanar si se comparte. Así que si algo de lo que lees te resuena… si alguna palabra te abraza por dentro… te invito a contar tu historia también. Aquí hay espacio para ti. Aquí te escuchamos con el alma.

Pici Valez

6/1/20251 min read

worm's-eye view photography of concrete building
worm's-eye view photography of concrete building

Contenido de mi publicación